viernes, 11 de diciembre de 2009

Diseñando y cuidando su jardin.



Introducción

Tener una nueva casa es un sueño que se asocia a mucho esfuerzo y, ya en su construcción o remodelación, muchos malos ratos, trabajo e ilusiones. El jardín es la última obra que debemos realizar, y es sin duda, el lugar que nos puede dar más satisfacciones, relajo y entretención.


La construcción de un jardin comienza con tener claro qué actividades queremos realizar en él:
Relajo
Meditación
Lectura
Asados
Reuniones
Juegos
Contemplación
Recorridos
Deportes
Jardinería
Producción orgánica
etc...

Una vez que definimos esto, comenzamos a distribuir los espacios que serán destinados a esas actividades.
Una posibilidad es contratar a una empresa que haga el total de los trabajos, sobre todo si es un jardín grande y requiere de mucho trabajo...otra posibilidad es solicitar sólo la ejecución de algunos trabajos, como movimientos de tierra, riego y piscina...y otra es la de encargar a un paisajista sólo el plano del jardín y ejecutarlo poco a poco, algo que disminuye la inversión inicial y permite que el total de gastos pequeños sea parte de un proyecto que será el definitivo.


Limpieza del terreno:
Debemos eliminar malezas y elementos gruesos del total de la superficie del jardín. Es importante considerar que lo que hagamos en esta etapa influirá directamente en la evolución del jardín y en la mantención que debemos hacer después. Las malezas pueden ser eliminadas mecánicamente (sacadas a mano y con picota), pero siempre es mejor aplicar un herbicida de contacto antes para asegurarnos de que la maleza muera desde su raíz (ver capítulo de herbicidas). Los herbicidas son caros, pero pueden dar excelentes resultados...incluso podemos usar parafina para matar malezas si nos aseguramos de no correr riesgos de incendio, ya que este elemento es la base de muchos herbicidas y es bastante más económico.
Remover y eliminar piedras grandes es fundamental, pero debemos considerar que las piedras pequeñas ayudarán mucho a mejorar el drenaje, sobre todo en suelos arcillosos y compactos. Picar la capa superior del terreno ayudará a enriquecer el drenaje y la calidad del suelo.


Preparación General de un terreno


El suelo de un futuro jardin puede clasificarse como:

Suelo cansado: es un fenómeno que se observa en los huertos o antiguos terrenos agrícolas donde no se ha desarrollado una rotación de cultivos.
Como regla general, esta situación se genera cuando el jardinero siembra o planta las mismas especies invariablemente sobre el mismo lugar. Cada especie vegetal saca del suelo cantidades importantes de elementos nutritivos y sembrar plantas del mismo tipo en forma frecuente acarrea, necesariamente, un déficit de esos nutrientes.
Suelo descansado: se genera en forma artificial al tener un suelo limpio, sin siembras ni plantaciones, y se le incorpora materia orgánica y nutrientes en primavera para sembrar recién en el otoño siguiente.
Suelo agotado: es un terreno que no ha sido fertilizado con regularidad. Sus elementos nutritivos han sido extraídos por las plantas o arrastrados por las aguas hacia capas profundas del terreno. En este caso el suelo debe ser ayudado en profundidad con abonos orgánicos y fertilizantes.
Suelo envejecido: es el suelo que ha sido fertilizado a fondo el año anterior con estiércol.
Si se mantiene y trabaja correctamente el terreno, eventualmente éste puede mejorar. Las intervenciones mecánicas que se hagan deben ser eficaces, por lo tanto deben ser realizadas en el momento adecuado y con las herramientas adecuadas.
Se distinguen dos clases de labores:
1. Labores profundas: horqueteo profundo, el ahonde y el picado con harneo.
2. Labores superficiales: el horqueteo superficial y rastrillado.
El horqueteo profundo consiste en mover la tierra con la horqueta, agregándole abonos y ablandándola. En otoño se horquetea y se deja durante el invierno. En primavera se rompen los terrones, se eliminan las malas hierbas que se extiendan por las raíces y se trabaja la parte superficial.
• Se entierra la picota en el suelo y se mueve hacia los lados para soltar el terreno y desarmar la capa superficial.
• Se rompen los terrones con horqueta o rastrillo.
• Se adicionan las mejoras necesarias.
El ahonde es necesario cuando la capa de tierra cultivable se ve muy fina. Con el azadón se alcanza un suelo más profundo y se mezcla esa tierra más baja con la superficial.
• Es necesario picar una capa de 10-15 cm. de profundidad utilizando el azadón.
• Se mezcla la capa suelta con la capa profunda.
El picado con harneo consiste en dar a la tierra una soltura de más de 40 cms. de profundidad. Se utiliza para ello el azadón, la picota y la pala, además del harnero, cuando sea necesario eliminar piedras gruesas.
La finalidad de este trabajo es remover el suelo muerto de las capas más profundas para traerlo a la superficie. Por lo tanto, con el fin de que reviva, se debe enriquecer con tierra de hojas, abono orgánico o abono compuesto. Para realizar este trabajo se debe:
• Picar el terreno con picota hasta la profundidad deseada.
• Picar los terrones con rastrillo y azadón.
• Pasar la tierra con la pala sobre el harnero, cuya malla tendrá anchos de trama variables, dependiendo del diámetro de las piedras que queramos eliminar. Lo ideal es dejar en el terreno las piedras de 3 cm. o menos de diámetro para favorecer un buen drenaje.
• Luego del harneo se incorpora la mejora necesaria y se extiende con el rastrillo la capa de base del jardín.

El horqueteo superficial busca sólo dejar el terreno más suelto, sin levantarlo, rompiendo sólo la capa superficial. Esto produce la destrucción de las malezas, pero éstas deben ser eliminadas a mano para sacar sus raíces. Esta labor es ideal para recuperar la capacidad de absorción de agua de un terreno.

• Se entierra la horqueta y se mueve suavemente, sin provocar el rompimiento de la capa superficial.
• Se pasa el rastrillo para eliminar malezas y granos gruesos.
El rastrillado consiste en pasar el rastrillo fuertemente por la capa superficial del terreno para eliminar malezas en suelo suelto.

Mejoras de los nutrientes del suelo

 


El humus y los microorganismos del suelo son los factores principales de su nivel de fertilidad.
El humus se forma gracias a la descomposición de la materia orgánica bajo la acción de microorganismos. Sin la labor de éstos, el estiércol, los residuos vegetales, la turba y otras materias orgánicas no tendrían ninguna utilidad. Su descomposición en elementos nutritivos simples, asimilables por las plantas, se produce mayormente en la capa superior de la tierra. 

Un kilo de mantillo de jardín (capa superficial de un terreno) contiene varios centenares de millones de microorganismos, en su mayor parte bacterias.
El humus permite una gran capacidad de absorción de agua, por lo tanto un suelo rico en humus es capas de retener una cantidad de agua mucho más importante que otro más pobre. Cuanta mayor cantidad de humus tenga un suelo, más fértil será; en cambio, la fertilidad de un terreno que no se abone durante mucho tiempo irá decreciendo. Para aumentar la cantidad de humus de un terreno debe abonarse con estiércol de animales o compost.
Existe un procedimiento de abono verde que consiste en sembrar plantas de flor y revolverlas con la tierra, dejándolas enterradas después de dar sus primeras hojas, justo antes de la floración.
Las lombrices pueden ser consideradas verdaderos “arados vivientes”. Su actividad provoca la ventilación del suelo y favorece la formación de humus. Ingieren residuos vegetales que se encuentran en el suelo. Así van a parar a su tubo digestivo unas partículas de tierra, bacterias y protozoos. Estos materiales se mezclan en su tubo digestivo, se reducen y se descomponen bajo la acción de su microflora intestinal.
La lombriz evacuará lo que no ha digerido: unos montoncitos que pueden verse frecuentemente en los jardines.


Preparación de un terreno para césped


Un bonito césped constituye uno de los elementos más importantes del jardín. Su color es relajante para la vista y su alfombra mullida invita al descanso y al relajo. ¿Quién podría olvidar esas tardes tirados en el pasto mirando el cielo y sintiendo la humedad en la espalda?...


Las superficies cubiertas de pasto son un atractivo elemento decorativo para resaltar los grupos de arbustos, los árboles ornamentales o los grupos florales.
Sin embargo, sembrar y mantener un pasto sano no es sencillo. Como debe durar años, es necesario trabajar cuidadosamente en el momento de su siembra.
Cuando se quiere incorporar el pasto a un jardín, se debe considerar que debe ser un lugar soleado, protegido de las corrientes fuertes de aire y con un suelo nutritivo y de buena calidad.
Antes de sembrar un césped, hay que realizar las labores básicas de mejoras del terreno, tanto mecánicas como de nutrientes, mencionada en los capítulos anteriores...
Los trabajos necesarios para la siembra son los siguientes:
1. Realizar un picado con harneo a una profundidad de alrededor de 60 cm., eliminando las piedras gruesas y malezas e incorporando las mejoras de mecánica (arena, compost, etc.).
2. En la labor de picado, conviene asegurarse de que no exista una capa de duripán (¿qué es?...no te preocupes...ya viene la explicación) en la profundidad de hasta un metro, por lo que es recomendable picar a esa profundidad en un punto del jardín. Si aparece el duripán, éste debe ser roto en varios puntos para asegurar un buen drenaje de las aguas superficiales del riego. Este trabajo resulta mucho más complicado, pero debe hacerse para asegurar que el pasto no será atacado por hongos ni se pudrirá, ya que el duripán no permite el paso del agua y la estanca en el suelo.
DURIPAN: Es una capa calcárea que aparece como una costra blanca a una profundidad de no más de 1 metro del nivel del suelo. Esta capa es dura e impermeable, por lo que impide el paso de raíces o de agua hacia las capas inferiores. En caso de tener una capa de duripán en el jardín, es necesario realizar una labor de picado en varios puntos e incorporar granos finos con arena para evitar que se vuelva a cerrar en ese punto. Si rompemos la capa y la cubrimos nuevamente, esta volverá a aparecer y se cerrará, causando el mismo problema con el tiempo.

3. Se debe realizar una nivelación prolija. Para esto se puede utilizar el rastrillo y un pisón de madera para compactar, usando siempre agua entre compactaciones. El pisón es una herramienta casera que se hace usando un mango de madera y una base de 50 x 60 cm. de madera de 2,5” de espesor, el que golpeará el suelo para apretarlo sin producir saturación. Además, esta labor nos ayudará mucho a liberar tensiones, porque después de un rato quedamos agotados...
El pisón se utiliza luego del rastrillado para apretar el suelo. Se riega con agua pulverizada (manguera con pitón) y se vuelve a apisonar. Con esto aseguraremos una buena compactación y una buena cama de recepción de las semillas

4. Es recomendable siempre incorporar humus o un buen compost en los primeros 15 cm. de suelo. Esta capa se aplica sobre el terreno apisonado y puede ser una capa de 2 cm. de humus grueso o de 5 cm. de tierra de hojas harneada, capa sobre la cual se apoyará la semilla.
Con estos pasos tenemos el terreno listo y preparado para recibir la semilla de pasto, asegurándole un buen desarrollo y un buen crecimiento en el tiempo.
DATOS:
o Se debe tener especial cuidado en la nivelación del terreno, ya que la eliminación de raíces de malezas y el picado pueden dejar desniveles que pueden afectar el terreno.
o La elección de las semillas dependerá de las condiciones climáticas, de suelo y uso que se le dará al césped.
o El césped se suele sembrar desde septiembre hasta marzo en Chile, dependiendo de las semillas y la mezcla que se incorpore. La siembra de enero y febrero debe estar asegurada por un sistema de riego adecuado.


Establecimiento del césped

 

Teniendo ya el terreno preparado para la siembra, es necesario asegurar una buena hidratación de las semillas. Para lograrlo, los trabajos de preparación del terreno deben garantizar un buen drenaje y una buena retención de agua, y asi lograremos mantener la humedad superficial sin causar daño a las plántulas. El sistema de riego es vital para favorecer el crecimiento sano y parejo de toda nuestra superficie de pasto.
Existen sistemas de riego automatico que son fáciles de instalar teniendo un buen caudal de agua en los surtidores del jardín. Se puede solicitar a expertos un plano de riego que asegure una buena cobertura y una buena presión de agua.
Si no se cuenta con un sistema de riego automático, debemos considerar la compra de un buen pitón de manguera que asegure que el agua llegue pulverizada a la tierra, ya que cualquier aposamiento o golpe fuerte de agua producirá el desplazamiento de la semilla y dejará superficies sin germinación.
El riego debe estar asegurado, en las primeras tres semanas, con una frecuencia de 4 riegos cortos durante el día. El riego más importante es el de la noche, pasadas las 21:00 hrs. ya que las plantitas hacen su fotosíntesis durante la noche y es cuando más absorben el agua. Durante el día, ellas deben protegerse de la deshidratación y es cuando captan toda la energía de la luz que utilizarán durante las horas de oscuridad para crecer.
Cualquier presión realizada sobre el terreno antes de la formación del manto de raíces del pasto causará un desnivel que será visible en el tiempo, por lo tanto debe asegurarse que no haya circulación de personas o animales durante la germinación. Los animales, además, queman las plántulas con mucha facilidad con su orina, por lo que deben estar alejados de la siembra para lograr un pasto parejo y sano...y los pajaritos...esos glotones comen felices de nuestras semillas...
El establecimiento de un pasto sano y duradero dependerá directamente de las labores realizadas en el terreno previo a su siembra y del cuidado que se le proporcione durante su período de germinación. Para esto es vital el proceso de sembrado y selección de semillas que se verá en el siguiente capítulo.

TIPOS DE SIEMBRAS

Antes de comenzar...un dato importante...
Como determinar la cantidad de tierra necesaria para un jardín:
Para tener éxito en la germinación de las semillas de pasto, además de las mejorar químicas y mecánicas de nuestro terreno debemos asegurarnos de lograr una buena siembra y para esto es vital contar con buena tierra y una incorporación adecuada de la semilla al suelo.


PASTO POR SIEMBRA TRADICIONAL CON SEMILLAS.

Para calcular la cantidad necesaria de tierra de hojas que utilizaremos en nuestra siembra, se debe multiplicar (Largo x Ancho x Alto) + 1%. Es decir, si nuestro jardín tiene 8 metros de largo, 5 metros de ancho, y hemos picado 30 cm., resultará (8 x 5 x 0.03) + 1%. Es decir, serían 1,2 m3 + 1%
Una vez nivelado el terreno, esparcir una pequeña capa de tierra de hoja bien harneada. Regar abundantemente y una vez húmedo, se esparcen al voleo las semillas. Es muy importante que la tierra de hoja este húmeda, para que podamos ver bien donde esta cayendo la semilla, con el contraste de la tierra.
VOLEO: es lanzar las semillas empuñadas en una mano y hacer una curva con el brazo, a una altura de 1 metro. Debe hacerse sin viento y llegando en forma pareja a toda la superficie de tierra.
Tapar las semillas con una pequeña capa de tierra de hoja harneada, también lanzada al voleo. Esta es la parte más importante, ya que si la semilla queda muy tapada no crecerá. La tierra debe ser lanzada a una altura no superior a los 80 cm.
• Regar inmediatamente con lluvia fina.
• Regar unas tres veces al día para mantener la humedad.
• 1 Kilo de semilla de pasto, alcanza para 12 a 16 metros cuadrados (esto lo define el productor en su etiqueta, pero siempre es mejor aplicar más semilla que la indicada...por los pajaritos, el viento...)
• Al pasto que queda a la sombra, es conveniente aplicarle potasio.


PASTO POR CHAMPAS
Si se quiere plantar el pasto por champas (o pedazos), se debe hacer la misma preparación que para el caso de siembra con semilla.
Champa se le llama al “trozo” de pasto sacado de un lugar y dividido en partes que se plantan a una distancia no superior a 15 cm. entre sí.
Este sistema es ideal para superficies rústicas, sin tránsito y donde importa poco la nivelación y el emparejado. Es para prados rústicos que convivirán con malezas.
Se coloca la champa de pasto presionando con los dedos y hundiéndola y se sellan los bordes con tierra de hoja. Así se van plantando una a una las champas.

PASTO POR ESTOLONES
Los estolones de pasto son los restos que quedan del corte de un pasto adulto. Es decir, son trozos de plantitas que servirán para generar nuevas plántulas.
Este tipo de siembra sólo puede hacerse con prados rústicos, que puedan regenerarse fácilmente, que sean invasivos por naturaleza (bermuda, festuca, etc...)
En aquellas partes donde se encuentra sembrado el pasto y se hace un pelón, solo se necesita pasar con fuerza un rastrillo para soltar la tierra y dejar un poco de tierra finita a un lado. Luego se siembra y se tapa con la capa finita de tierra que teníamos apartada.

PASTO PRECULTIVADO (SOD O TEPES)
Puede conseguirse un césped rápidamente, pero a un mayor costo (desde $1.300 hasta $2.500 por metro cuadrado), empleando césped en rollos o tepes. De esta manera se reduce al máximo el tiempo empleado para conseguir un lindo pasto alfombra. En este caso, los tepes deben colocarse sobre la tierra seca.
En primer lugar, hay que preparar el terreno aplanándolo e incorporándole una capa de humus de 2 a 3 cm.. de espesor rico en sustancias nutritivas. Luego se realiza el “sellado”, cuyo fin es aumentar la adherencia de la alfombra al suelo, favoreciendo un desarrollo sano y fuerte: se rellenan todas las uniones con compost para mantener constante el grado de humedad en la tierra. Finalmente se riega abundantemente previniendo que no se seque.
Es la forma más rápida para establecer un nuevo prado, sin embargo es la más cara. El sod es un transplante de pasto que es sembrado y cosechado en otro lugar, cuyo suelo es diferente al que se está aplicando. Es necesario tener una capa de tierra suelta y con mucho riego para que el pasto se pueda recuperar y desarrollar un nuevo sistema de raíces.

PASTO POR HIDROSIEMBRA
La Hidrosiembra consiste en la proyección de una mezcla homogénea de semillas, mulch, fijadores, fertilizantes, aditivos y agua, sobre el terreno, mediante una máquina hidrosembradora.
La hidrosiembra realizada en los suelos pobres (ausencia de materia orgánica, déficit de elementos nutritivos) es una práctica relativamente corriente, a veces indispensable, por una falta de tierra apta para el cultivo, inaccesibilidad del lugar después de la obra, etc.
Cuando la Hidrosiembra se inventó en 1953 en Estados Unidos, las técnicas de sembrado convencionales no tenían la capacidad para vegetar las laderas con mucho declive, resultado de la construcción de carreteras, y la hidrosiembra fue la respuesta. También se pudo observar que el pasto que se sembró con este sistema creció más rápido y mejor. Como consecuencia de estos descubrimientos, durante los últimos 50 años se ha trabajado continuamente para desarrollar nueva tecnología en este campo y para ampliar las aplicaciones del sistema de hidrosiembra.
Este sistema de siembra fue tecnológicamente diseñado para establecer vegetación de una forma efectiva, ecológica, rápida y económicamente atractiva. Las semillas son seleccionadas para el terreno específico, lo cual minimiza la posibilidad de sembrar semillas inadecuadas para el terreno, y los aditivos que se utilizan fomentan una germinación óptima. La siembra se realiza mediante una mezcla de agua, semilla, fertilizantes, fijadores, aditivos y mulch con colorante.
• Agua: Actúa como un portador y acelerará el proceso de germinación de la semilla. La dosis de agua utilizada en la hidrosiembra es entre 2-5 litros /m2.
• Semilla: Puede utilizarse casi cualquier semilla, de césped, flores silvestres, forraje, etc. en la misma proporción de otros métodos de siembra.
• Mulch: Puede estar compuesto de fibras de celulosa, madera o por mezcla de estos dos, y tiene la capacidad de absorber 10 veces su peso en agua, es un producto reciclado y biodegradable. Se le agrega colorante verde (orgánico y biodegradable) para indicar las áreas aplicadas y las densidades, asegurando una aplicación uniforme. Sus funciones son proteger contra la erosión, proteger contra el impacto de las gotas de lluvia o riego, reduce la velocidad de evaporación, manteniendo más tiempo la humedad necesaria para la germinación, protege la semilla contra aves y otros depredadores, aporta materia orgánica, prolonga el período vegetativo y de siembra, conserva la estructura superficial del suelo y modera la temperatura.
• Fertilizantes: Generalmente se utilizan en la mezcla. El más común es un fertilizante con alto porcentaje de fósforo que estimula el crecimiento de las raíces.
• Fijadores (Tackifier): Productos solubles y biodegradables que forman una película homogénea, elástica y permeable sobre el terreno, que ayudan a mantener la tierra y el mulch para prevenir erosión.
• Otros aditivos: Se pueden emplear bio-estimulantes, cal (para regular pH), copolímeros HYGEL que tienen capacidad de retener 400 veces su peso en agua con entrega lenta de humedad. Especialmente para control de erosión se aplica HYNET, compuesto de fibras sintéticas que se entrelazan con el mulch, formando una verdadera red en el suelo fijando la aplicación para proteger el terreno de la erosión causada por la lluvia, viento, etc..

En Chile este sistema de siembra es muy poco conocido y no se utiliza en forma frecuente.


TIPOS DE SEMILLAS Y MEZCLAS MáS COMUNES


Tipos de Semillas puras
BERMUDA GRASS
USO:
• Especie rastrera de rápido cubrimiento. Forma prados densos que, exceptuando el invierno, se mantienen verdes durante todo el año. Es muy resistente al pisoteo lo que la hace ideal para campos deportivos de todo tipo, así como para cualquier área verde de uso intenso. Soporta cortes bajos y requiere de pocos cuidados de mantención. Se puede sembrar sola o con otras gramíneas.

EPOCA DE SIEMBRA:
• Esta especie debe sembrarse en Primavera - Verano.
No se recomienda su siembra en Otoño - Invierno pues se corre el riesgo que la Bermuda no germine.

CHEPICA ALEMANA ( Agrostis tenuis )
• Verde azulado
• Textura fina
• Siembra todo el año

USO:
• Especie que gracias a sus estolones y rizomas cortos forma un prado denso, de un atractivo color verde azulado que se mantiene durante todo el año. Tolera en buena forma la sombra, no así el uso intenso o pisoteo. Puede ser sembrada en mezcla con otras gramíneas.

EPOCA DE SIEMBRA:
• La mejor fecha es temprano en Otoño, pero se puede sembrar en otras épocas del año, evitando períodos fríos y lluviosos.
En siembras de Primavera - Verano se recomienda utilizar la dosis máxima, es decir 250 g/10 m2.


CREEPING BENTGRASS (Agrostis palustris)
• Hojas enrrolladas en el brote.
• Lígula membranosa, alta y redondeada.
• Collar angosto.
• Aurícula ausentes.
• Vainas suaves y comprimidas.
• Láminas angostas, aplanadas, con nervaduras vistosas y ásperas a lo largo de los bordes.
• Inflorescencia en forma de panícula, generalmente comprimida.
• Espiguillas pequeñas, de forma elíptica y con una semilla única.

Agrostis palustris es una especie que posee estolones largos y finos, los cuales producen raíces por cada nudo de crecimiento permitiéndole formar una carpeta muy densa. Es ampliamente usada en putting greens y en parques y jardines suntuarios de alta mantención. Para lograr el mejor potencial de esta especie es necesario que tenga buena exposición solar, alta fertilización, pH entre 5.6 - 7.0, buen drenaje y que el suelo tenga un buen nivel de materia orgánica. Esta especie tiende a una alta producción de thatch, la que se logra mejorar con cortes verticales del césped. Es una de las pocas especies que soporta cortes de 3 - 5 mm, con lo que se logra una carpeta ideal para deportes tan exigentes como el Golf.

DICHONDRA ( Dichondra repens )
• Verde todo el año
• Textura fina
• Baja frecuencia de corte

USO:
• Prado de hoja ancha y ovalada, más conocida como "Oreja de Ratón”. Forma un colchón continuo de color verde petróleo intenso, de textura fina y suave. Posee mediana resistencia al pisoteo lo que la hace apta para espacios de tránsito moderado. Se puede sembrar en mezcla con gramíneas y tolera sombra.

EPOCA DE SIEMBRA:
• Esta especie debe sembrarse en primavera - Verano.
• No se recomienda su siembra en otoño - Invierno pues se corre el riesgo que la Dichondra no germine.

FESTUCA ALTA ( Festuca arundinacea )
• Hojas enrrolladas en el brote.
• Lígula membranosa y corta.
• Collar amplio y continuo.
• Aurícula ausente.
• Vainas no comprimidas y de color rojo-rosado bajo suelo.
• Láminas aplanadas, con nervaduras prominentes en la punta, ásperas a lo largo del borde y de punta aguzada.
• Inflorescencia con forma de una erecta y algo comprimida panícula.
• Espiguillas con 6 a 8 semillas

Gramínea perenne de gran resistencia que puede ser sembrada a lo largo de casi todo nuestro territorio. Soporta bien suelos sombríos, bajas temperaturas, suelos húmedos o secos, ácidos o alcalinos, pero prospera mejor en suelos fértiles y bien drenados. Debido a su profundo sistema radicular tolera el uso intenso y la sequía (en condiciones óptimas sus raíces pueden llegar a los 2 mt), sobreviviendo donde otros prados no lo pueden hacer. Se recomienda sembrar en mezclas con Poa pratensis o Bermuda para canchas deportivas. Soporta cortes medios y altos y necesita una fertilización moderada.

FESTUCA CHEWINGS (Festuca rubra conmutata)
Gramínea de follaje muy fino, verde todo el año, y principalmente usada en mezclas con otras gramíneas como Rye grass perenne y Poa pratensis. Se destaca por tener resistencia a la sequía y a los stress. Color verde oscuro y buen comportamiento en suelos sombríos. Hábito de crecimiento: macolla.
USOS:
Jardines, parques, canchas de golf.
DOSIS DE SIEMBRA SOLA: 250 kg / hectárea.


FESTUCA CREEPING ( Festuca rubra rubra )
• Hojas plegadas en el brote.
• Lígula membranosa y muy corta.
• Collar angosto sutil.
• Vaina levemente áspera, no comprimida, más ancha que la lámina.
• Lámina muy angosta, de 1.5 mm. de ancho o menos, en forma de crin y levemente plisada.
• Inflorescencia en forma de panícula gruesa y cerrada.
• Espiguillas de color verde pálido, ásperas, con artistas cortas y de 4 a 6 semillas.

Césped denso, perenne y de lámina fina - semirastrera, de color rojo a púrpura en la base. Se propaga por rizomas cortos. Es usado como un excelente césped de sombra. Es una buena especie para ser usada en mezcla de textura fina. Soporta cortes bajos y presenta una buena recuperación post - invernal. Tiene muy buen crecimiento en suelos sombríos, pobres y algo ácidos. Existen variedades especialmente indicadas para sobre siembras de invernadero dada su excelente cobertura, sobre todo Cyndon dactylon

FESTUCA DURA ( Festuca ovina )
Prado de color verde oscuro, fino, muy denso, del tipo macollo decumbente (menos cortes) que se extiende muy lentamente y con renuevo basal. Se le conoce como "Festuca Dura" y es de muy lento crecimiento. Una vez establecida con éxito este tipo de festuca es de baja mantención, es decir requiere de escasa irrigación, baja fertilización y pocos cortes. Además tolera sectores sombríos y suelos con pH ácido. Estas características de baja mantención lo convierten en una especie ideal para ser utilizada en lomas de canchas de golf, y áreas sombreadas de roughs.
APLICACIÓN:
Se recomienda sembrarla sola, o como componente de mezclas de prados de alta calidad. Como variedad sola dará origen a un césped muy denso en aplicaciones con baja mantención. Esta especie puede ser mezclada con Poa pratenis, Ryegrass perenne y otras festucas finas para un turf atractivo y duradero.
DOSIS DE SIEMBRA SOLA: 250 Kg / hectárea.


POA PRATENSIS ( Poa pratensis )
• Hojas plegadas en el brote.
• Lígula membranosa y muy corta.
• Collar angosto.
• Aurículas ausentes.
• Vaina verde, comprimida y suave.
• Lámina larga, de menos de 3mm de ancho, de bordes paralelos entre si y con terminación con forma de canoa.
• Inflorescencia en forma de panícula piramidal abierta.
• Espiguillas aplanadas y con 3 a 5 semillas

Poa pratensis es una gramínea perenne que se reproduce tanto por rizomas como por semillas. Esta especie germina en 6 - 12 días, pero es de muy lento establecimiento (21 - 28 días). Es por lo mismo que usualmente es sembrada en combinación con otras gramíneas de establecimiento más rápido (nursery grass), como Rye grass perenne. Poa pratensis tiene una baja frecuencia de corte -uno por semana-, resiste de muy buena forma el pisoteo intenso, y es usado ampliamente en campos deportivos, fairwais.

POA TRIVIALIS ( Poa trivialis )
• Hojas plegadas en el brote.
• Lígula membranosa, larga y dentada.
• Collar ancho y suave.
• Aurículas ausentes.
• Vaina comprimida y áspera al tacto.
• Lámina plana, de 3 mm de ancho, con los bordes ásperos, angostando hacia la punta terminando en forma de canoa.
• Inflorescencia en forma de panícula oblonga.
• Espiguillas aplanadas con 2 a 3 semillas.

Especie mejor adaptada a zonas frías, húmedas y sombrías. Tolera muy bien las bajas temperaturas, pero no así el calor y la sequía. Se usa en mezclas con Rye grass perenne y Festuca creeping en suelos con mal drenaje. Requiere cortes altos y fertilización moderada. Se recomienda en sobresiembras primaverales. Es una especie perenne y estolonífera que tiene un establecimiento relativamente rápido de 14 - 18 días, pero no se la recomienda para prados de alto tráfico.

RYEGRASS PERENNE ( Lolium perenne )
• Lígula membranosa, de altura mediana y dentada cerca de la punta.
• Collar angosto.
• Aurículas cortas que no abrazan al tallo.
• Vainas bajo el suelo de color rojizo y suaves.
• Láminas de 3-6 mm de ancho, con nervaduras prominentes, muy brillantes y suaves por el envés.
• Inflorescencia en forma de una larga y angosta espiga, con las espiguillas orientadas opuestas a lo largo del tallo.
• Espiguillas aplanadas, sin aristas, con 6 a 10 semillas.

Gramínea ampliamente usada en todo el mundo considerada una de las especies de prado más valiosas. Presenta una excelente tolerancia al uso, rápida germinación (7 - 10 días) y muy rápido establecimiento. Por otra parte es una especie que no tiene resistencia a la sequía y requiere de alta mantención (riego, fertilización y cortes). Como producto de la investigación han aparecido variedades con mejor tolerancia al uso, mayor vigor invernal, resistencia a enfermedades y tolerancia al calor y sequía.

TREBOL ENANO ( Trifolium repens )
• Verde todo el año
• Alta resistencia al pisoteo
• Rápido cubrimiento
• Resiste suelos húmedos

USO:
• Prado de alta resistencia al pisoteo que puede sembrarse solo o asociado con gramíneas las que le confieren al prado un aspecto parejo y denso de color verde oscuro. Es ampliamente usado en todo tipo de jardines, aunque no se recomienda en piscinas o campos deportivos. Su capacidad como fijador de nitrógeno lo hace muy apropiado para ser sembrado en suelos pobres.

EPOCA DE SIEMBRA:
• La mejor fecha es temprano en otoño, pero se puede sembrar en otras épocas del año, evitando períodos fríos y lluviosos.
• En siembras de primavera - verano se recomienda utilizar la dosis máxima, es decir 250 g/20 m2.


TREBOL FRUTILLA ( Trifolium fragiderum )

Leguminosa verde oscura, hoja lanceolada, estolonífera, especialmente recomendada para ser sembrada en mezcla con otras gramíneas en suelos arcillosos y con mal drenaje.
DOSIS DE SIEMBRA SOLA: 60 kg / hectárea.


Mezclas de semillas de prados

1. Derby: es la antigua mezcla manquehue pero mejorada con nuevas variedades. Es un prado resistente, parejo y firme, de color verde todo el año.
• Época de siembra: todo el año
• Dosis de siembra: 1 kg. por 20 m2 de terreno

2. Golf: mezcla multipropósito desarrollada para cubrir amplias extensiones, como canchas de golf, parcelas de agrados y canchas deportivas. Es verde todo el año, resiste el pisoteo y es de apariencia fina.
• Época de siembra: todo el año
• Dosis de siembra: 1 kg. por 10 m2 de terreno

3. Trébol enano: pasto bajo y rastrero de poca resistencia al pisoteo. Es ideal para ser sembrado en terrenos húmedos o pobres, ya que al ser leguminosa en capaz de fijar el nitrógeno y enriquecer suelos con carencias.
• Época de siembra: todo el año
• Dosis de siembra: 1 kg. por 80 m2 de terreno

4. Manquehue con dichondra: mezcla que cuenta con semillas de alta calidad. Pasto verde durante todo el año, resistencia y de hermosa apariencia
• Época de siembra: noviembre a febrero
• Dosis de siembra: 1 kg. por 20 m2 de terreno

5. Estadio (Strong grass): mezcla de alta resistencia al pisoteo, calor y falta de agua. Ideal para zonas de juegos, piscinas y canchas.
• Época de siembra: todo el año
• Dosis de siembra: 1 kg. por 20 m2 de terreno

6. Rustic grass: mezcla resistente a los riegos deficientes, al calor excesivo y al pisoteo. Es de color verde más oscuro y es ideal para zonas amplias de empastados.
• Época de siembra: todo el año
• Dosis de siembra: 1 kg. por 10 m2 de terreno


Mantención de prados


El mantenimiento del pasto requiere labores fijas: el corte, el riego, el desmalezamiento y las fertilizaciones. Estas labores son determinantes del resultado final de nuestro trabajo.




Hay que tener especial cuidado con respecto a las malezas. Se eliminan las vivaces y se extraen sus raíces con un cuchillo o una piqueta, lo que permite no dañar el césped. En las superficies grandes, donde este tipo de limpieza es imposible, se debe recurrir a los herbicidas. En cuanto a las malezas anuales, un corte regular del pasto bastará para ahogarlas (ver capítulo de herbicidas).
Hasta el otoño es necesario cortar el pasto cada 5 ó 15 días, para que no se encuentre demasiado largo en el momento de las primeras heladas. El mejor método para conseguir un pasto verde y hermoso es cortarlo con regularidad, lo que permite reducir el consumo de agua y, por lo tanto, especiar los riegos. Hay que tener claro que se debe regar a fondo un pasto después del corte durante el verano, cuando no hay lluvias ni humedad en el ambiente.
A partir del final del verano no se utilizan abonos nitrogenados en el pasto. Con esto nos aseguramos de no favorecer su crecimiento acelerado y dejarlo menos sensible a las heladas.
En suelos pobres, especialmente aquellos en que los elementos nutritivos han sido eliminados, inmediatamente después del corte se aplican 150 grs. de abonos potásicos y fosfatados y 2 kg. de compost por cada 10 m2. Si el pasto no crece demasiado rápido, puede repartirse la hierba cortada uniformemente sobre éste. Esta capa lo protegerá de las heladas más intensas.
Cada cierto tiempo debemos pensar en airear el pasto con un rastrillo de púas de acero flexible (idealmente una cola de pava). La aireación es importante sobre todo si el terreno es compacto y duro. Este rastrillado impide la formación de musgos que, por lo general, sólo aparece en pastos mal mantenidos. Sin embargo, la sombra permanente, un corte demasiado corto, una humedad constante y una carencia prolongada de sustancias nutritivas favorecen la aparición de este musgo. Por esto, es aconsejable rastrillar, incorporar compost y añadir cal por lo menos una vez al año, preferentemente al inicio del invierno.
Cal: elemento vital para mejorar la aireación en suelos muy compactados y duros. Puede también incorporarse arena de lampa.

GENERALIDADES
Manejo del Pasto:
• Primer Corte: El primer corte hay que dárselo más o menos cuando tenga 10 cm. de altura. Esto se debe hacer con orilladora o tijeras (nunca con máquina), y se debe dejar de unos 5 cm. de altura.
• Frecuencia de los Cortes: En Invierno se debe cortar el pasto 1 o 2 veces al mes, en Primavera cada 15 días y en Verano 1 vez a la semana.
• Para cortar el pasto, este debe estar absolutamente seco, ya que de lo contrario este se romperá.
• Cuando se corta el pasto, es conveniente recogerlo, ya que esto evitará los hongos y la propagación de malezas. En caso de que los cortes sean muy seguidos, el desecho puede dejarse para ser reutilizado como materia orgánica para el mismo pasto.

Aireación de la Tierra: Se debe enterrar la horqueta, más o menos 15 a 20 cm., en forma vertical. Esto se debe hacer 1 vez al mes, especialmente en los meses de Primavera y Verano. Con esto se favorece la aireación y una buena absorción de agua por parte de las raíces.